CAPITAL DE LA UTOPÍA
Por Pancracio el Indiscreto

Sabanalarga, es considerada la puerta a de la tierra de los sueños.  Ubicada en pleno centro del Departamento del Atlántico. No sabe si festejar con gran jolgorio el día de su fundación 26 de enero de 1.744 o el 24 de septiembre día de la virgen de las Mercedes, su matrona. 

El sol emerge por el oriente en unas radiantes mañanas al igual que las noches de luna en su plenilunio, ambos serenos y majestuosos, pues así lo contemplan una parte del río magdalena.  Al otro lado, en el oeste, el cristal oscuro de la ciénaga del Guajaro se traga a el sol en el ocaso.  Por el norte es energizado por la subestación eléctrica con muchos altibajos en su voltaje y eficiencia en el servicio más caro y poco confiables, causándole mucho daño a usuarios y comerciantes.

Esta tierra capital de la utopía nos sigue esperando aún cuando un poco maltrecha y cansada por el mal trato de algunos de sus inefables hijos, por ella como buena madre fuerte en su exquisito afán de verdadera anfitriona que sabe hacer feliz al hijo y huésped fatigado

En ella tomamos café, ron, cerveza, guarapo de caña u otro refresco, después de un merecido descanso casi siempre salgo a caminar las calles curvas, unas interminables otras cortadas por estrechos callejones, que se estrellan con edificaciones cuyas construcciones de tipo colonial republicana o moderna arquitectura, en pequeños sesgos alternados que comunican a otra calle curva, calles y avenidas con bulevares, parques y andenes en mal estado y abandonados, dando la sensación de estar en un inmenso castillo laberíntico así como transcurre la vida política, social y mental de sus gentes, como si fuera una fiel replica de  algún pueblo del medio oriente con sus calles agujereadas, dinamitadas por la cantidad de huecos y mal estado de las vías.

 Cuándo se marcha, nos despedimos diciendo “chao” o “adiós Doctor”, adiós, de igual manera al encuentro con alguien, comúnmente se le pregunta entre “mamadera de gallo” ¿Hombre y cuando vino? Contestando jocosamente, hombre, si yo  nunca me he ido (risas).  Antes esos saludos eran más respetuosos y acordes a la hora del día y del grado de amistad, los que se hacían al pasar o llegar y ver sentado a fuera o dentro de la casa, en un taburete recostado en la pared en el marco de la puerta o en un “Horcón”.

Hubo y hay de todo y para todos, desde almacenes, cacharrerías, fritangas, peluquerías, las boticas, (droguerías) etc, que fueron primero que el concepto de los boutiques, las salas de belleza, los sitios sports y supermercados y droguerías.  Así como existió al famoso Telégrafo manual antes de que apareciera la insensible Telecom. Y el inconmensurable celular.  Parecíamos en ese entonces una próspera provincia alemana o española.

La intelectualidad de ese entonces de la tierra de los sueños va desde cuando existían el llamado Colegio Superior (que servía de reto a los estudiantes de primaria, pues era un honor llegar a él) que salían buenos bachilleres del CODESA a estudiar a Cartagena, Bogotá, Medellín, Santa Marta, Montería, que eran bien acogidos y respetados. Se sentían orgullosos y verdaderos sabanalargueros de nacimiento y corazón.

Si Ud, viene y ama a Sabanalarga es por su encanador espíritu tranquilo, amigable, de puertas abiertas que ata al transeúnte del caribe, del interior turco, o viajero errante que se instala y logra establecer cualquier negocio comercial u otro o de rifas millonarias dándola apariencia de pueblo rico en dinero.  Pero lo que existe es otra cosa Sabanalarga es y sigue siendo la puerta de entrada para muchos, como si dijéramos que es la Tierra de la Magia.

Fue capital de provincia antes que Barranquilla (1.905) y pudimos mantenernos o ser más, con tanta gente que ocupó grandes y claves posiciones, lo que no estuviéramos en estas si hubiéramos aprovechado ese cuarto (1/4) de hora por Sabanalarga. Hubo fue triunfos personales.

Pero aún, seguimos soñando y tenemos y debemos ir creando los momentos que nos inspiren, la cultura que nos identifique el producto y el festival que nos haga (re)conocer y competir, el Deporte que nos represente, la música que se inspire como nuestro segundo himno y se convierta en la salvadora de los sueños de su buena gente.  Que seamos nuestro propio Arquitecto Social.

Nos gustaría contar con su opinión, su colaboración para los que quieran recuperar la memoria, a la edad del retorno de los sueños para concretarlo en un proyecto mágico.

Va a ser obligatorio ver una vez al día, por lo menos esta página de Internet para llegar a la Sabanalarga que estamos promoviendo proyectado para el futuro.

Para entonces, poder contar con niños, jóvenes preparados, cuenteros dispuestos a embriagarlos con sus historias del lugar, del legado oculto, de sus barrio, de sus calles, donde muchos quisieran estar todos conocer y revivir aquellos momentos, con otro enfoque, por supuesto, para olvidarse de tanta politiquería y corrupción en pro de nuestra tierra y salir delante.

Si nos ponemos a hojear el Plan de Desarrollo, (cada gobernante hace el suyo representa gastos), el POT, el SISBEN, la ESTRATIFICACIÓN y las injustificables reestructuraciones son grandes obras, realidades soñadas para descentralizar el conocimiento y cortar la cabeza a la cobra que castró a este pueblo con su nefasta Escuela y sus más fieles alumnos (con todo respeto a nuestra gente, pero debemos decir que por culpa de esta Escuela Política, aún vigente, a los sabanalargueros nos ha pesado peor que a los perros, pues estos, abren los ojos a los ochos días de haber nacido y mucha gente – sobre todo los fanáticos – llevan más de 30 años y aún no los han abierto ni quieren).

Llegó la hora de que las poblaciones intermedias de la costa  como Sabanalarga- cumplan el papel que deben asumir en las regiones civilizadas.  De ello dependerá que los intelectuales, profesionales y la gente normal de nuestra generación, esparcidos en distintos lugares y ciudades colaboren y no nos dejen soñar solos, y coloquen las bases para una VERDADERA CAPITAL,  libre de ruidos, vicios y contaminación.

Hijos, hermanos, nietos y sobrinos se lo agradecerán.

Así que hermanos, vamos a construir, vamos a hacer que el sueño de la Provincia de la memoria recuperada sea una realidad.  Es nuestro deber. Les esperamos como colofón final esto que dice: los pueblos no esperan que los sigan sino que los guíen.