Hipercolesterolemia
Por Marcos
Elías Navarro Araújo Médico y Cirujano
El tema que trataré en el presente escrito trata
sobre la Hipercolesterolemia, la cual consiste en el
aumento
en sangre por encima de los niveles normales del
Colesterol, y esta además se relaciona con
enfermedades y cuadros clínicos, incrementando el
Riesgo Cardiovascular.
La Hipercolesterolemia
más que una enfermedad, es una alteración del
metabolismo de los lípidos (grasas), por así decirlo
es un desajuste, que si no se llega a “reparar” a
tiempo puede conllevar a enfermedades, como el
Infarto Agudo del Miocardio (IAM) ó la Enfermedad
Cerebrovascular (ECV, el famoso derrame cerebral)
también, puede el aumento del colesterol puede ser
consecuencia de una enfermedad.
Es decir, la
hipercolesterolemia puede conllevar a enfermedades o
ser secundaria a ellas.
El Colesterol es un
lípido, el cual se encuentra en los tejidos del
cuerpo y también en la sangre, más exactamente en el
Plasma.
El Colesterol
se puede producir endógenamente (de los cuales el Hígado es el mayor
lugar de síntesis) o exógenamente con los alimentos
que consumimos; su producción es necesaria para
satisfacer muchas necesidades del organismo entre
las cuales se destaca la producción de hormonas
sexuales, contribuye a la formación de la membrana
celular de nuestros tejidos y órganos, en la
digestión porque es requerida para la formación de
las sales biliares, en la producción de la Vitamina
D también, participa en la elaboración de hormonas
importantes para la homeostasis (equilibrio
fisiológico) del cuerpo como son el Cortisol y la
Aldosterona, y en muchos procesos más es importante.
Como se pueden dar
cuenta según lo expuesto en el párrafo anterior, el
Colesterol es necesario para el normal
funcionamiento del organismo, hace parte de nuestro
metabolismo, y por eso es fundamental para nuestra
salud pero, para cumplir las funciones mencionadas
en el párrafo precedente, necesita ser transportado
por otras sustancias a los sitios donde actuará,
esas sustancias las denominamos Lipoproteínas, más
adelante verán la importancia de estas cuando se
evalúa un paciente con Hipercolesterolemia o que se
sospeche pueda tenerla.
Las Lipoproteínas,
están formadas por una fracción lipídica y una
proteica, como se dijo anteriormente, su función es
transportar grasa, es decir no tan solo transportan
colesterol, sino también triglicéridos y
fosfolípidos entre otros pero, el objetivo de este
escrito se relaciona con el colesterol razón por la
cual no entraremos en detalles con las otras
sustancias transportadas; entre más densa es una
lipoproteína, esta tendrá menor capacidad para
transportar grasas.
Las lipoproteínas se
clasifican en: Quilomicrones, Lipoproteínas de muy baja
densidad (VLDL), Lipoproteínas de baja densidad (LDL),
Lipoproteínas de densidad intermedia (IDL) y
Lipoproteínas de alta densidad (HDL). En el caso del
colesterol y la hipercolesterolemia, las más
relevantes y que más nos interesan son las HDL y
VLDL.
El HDL (High Density
Lipoprotein), es decir la Lipoproteína de Alta
Densidad, se encarga de recoger, “barre” el
Colesterol de la sangre y lo transporta hacia el
hígado para su eliminación o excreción, lo cual
indica que permite que los niveles de este lípido
disminuyan en el torrente sanguíneo y del organismo.
Esta lipoproteína es la responsable del término
“Colesterol Bueno”.
El LDL (Low Density
Lipoprotein), en español es la Lipoproteína de Baja
Densidad, se encargan de transportar el Colesterol
hacia los tejidos por el torrente sanguíneo, en
condiciones normales no representa problema alguno
pero cuando sus niveles están por encima del rango
normal, incrementa el Riesgo Cardiovascular, por esa
razón se le conoce como “Colesterol Malo”.
Como se pueden dar
cuenta, los términos de Colesterol Bueno y
Colesterol Malo, no hacen referencias al Colesterol
solamente, sino que indica los niveles de
Lipoproteínas encargadas de transportarlo, y de paso
resuelve la duda sobre si hay un tipo de Colesterol
bueno y uno malo, pues se trata de uno solo, y lo
que expresa HDL y LDL es saber si está siendo
transportado correctamente el Colesterol hacia su
excreción y mantenerlo en límites normales (HDL) ó,
si el transporte esta aumentado hacia los tejidos,
lo cual puede conllevar a incremento de sus niveles
normales y representar problemas (LDL).
Pero hay que
mencionar que el HDL y el LDL son buenos, cumplen
funciones fisiológicas establecidas, el problema
viene cuando se rompe el equilibrio, y se produce
aumento del LDL o disminución del HDL.
Ahora ya habiendo
realizado una pequeña explicación sencilla y
concreta sobre aspectos fundamentales para
comprender el Colesterol y sus transportadores,
hablemos sobre el aumento de sus niveles normales en
sangre y sus repercusiones sobre el estado de salud.
Cuando hablamos de Hipercolesterolemia, no referimos
a niveles de Colesterol Total (CT) en sangre
superiores a 200 mg/dL.
La Hipercolesterolemia puede
ser Primaria o Secundaria, en la primera se refiere
a anomalías genéticas responsables del aumento del
colesterol o defectos en las Lipoproteínas; en la
segunda, hace referencia a enfermedades subyacentes
que contribuyen al aumento de este lípido, como lo
son enfermedades hepáticas, renales, endocrinas
entre otras.
TIPOS
DE HIPERCOLESTEROLEMIA |
PRIMARIA |
SECUNDARIA |
Alteraciones Genéticas
Hipercolesterolemias Familiares
Hipercolesterolemia Poligénica grave
Hiperlipidemia Familiar Combinada
Otras
alteraciones
Defectos
en las Lipoproteínas |
Enfermedades Hepáticas
Hepatitis,
Cirrosis, Colestasis hepática
Enfermedades Endocrinas
Diabetes
Mellitus, hipotiroidismo
Enfermedades Renales
Sínd.
Nefrótico, Insuficiencia Renal Crónica
Medicamentos y Sustancias
Esteroides
Anabolizantes, etc
Otras
enfermedades. |
Una serie de factores,
que pueden operar independientemente o asociados,
pueden conllevar al aumento de los niveles de
Colesterol en el organismo también estos factores
actúan en conjunto con lo mencionado en la tabla
anterior o pueden hacerlo de forma independiente o
no relacionada, estos factores entre otros, son:
Dieta:
El consumo
abusivo de bebidas alcohólicas y grasas animales
contribuye al aumento de los niveles de Colesterol y
otros lípidos.
Edad:
Las mujeres mayores de 55 años o postmenopáusicas, y
los hombres mayores de 45 años, tienen un riesgo
mayor de presentar hipercolesterolemia.
Tabaquismo:
Aumenta los lípidos debido a sustancias nocivas
derivadas de los componentes del cigarrillo y otros
productos del tabaco.
Sedentarismo:
La falta de ejercicio y actividad física contribuye
al aumento de los niveles de Colesterol y otras
grasas.
Antecedentes Familiares:
El tener familiares en primer grado, es decir
padres, hijos, hermanos, con antecedente de
Dislipidemias, incrementa el riesgo y posibilidad de
padecer estos trastornos.
Conociendo estos
factores, imagino que usted se preguntará cómo saber
si padece de Hipercolesterolemia, y que síntomas
presenta.
La respuesta es sencilla, se tiene que
realizar
un examen de laboratorio donde
se midan los Niveles de Colesterol en sangre.
En cuanto a los
síntomas, la Hipercolesterolemia por sí sola no
presenta síntomas propios, la presencia de síntomas
se relaciona con el compromiso de órganos y
estructuras, sobretodo del sistema Cardiovascular y
que pueden poner en riesgo la vida.
Entre los
síntomas y signos que pueden presentarse en la
Hipercolesterolemia se destacan los siguientes:
Adormecimiento de
extremidades.
Visión borrosa.
Angina (dolor) de
pecho.
Edema (Hinchazón) de
extremidades.
Mareos.
Pérdida de equilibrio.
Xantomas (acumulación
de grasa debajo de la piel).
Xantelasmas
(acumulación de lípidos en los parpados.
Infarto Agudo de
Miocardio.
Enfermedad
Cerebrovascular.
Claudicación
intermitente.